Miguel Calderón Suárez
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Alajuela - “Papitos, si yo me muero, muero con Dios”, así se despidió de sus nietos María Paulina López García la noche del miércoles, pero quien horas más tarde fue aplastada por un terraplén mientras dormía en su casa en Guadalupe de Alajuela.

El cuerpo de la mujer de 72 años quedó enterrado tres metros bajo tierra, según informó la Policía local.

El hecho, ocasionado por las torrenciales lluvias que se presentaron en casi toda la provincia eriza, ocurrió pasadas las 12 a.m.

Marvin Campos, jefe del hogar e hijo de López, recordó que “como a las 10 p.m. del miércoles empezó a llover demasiado. Mi mamá estaba en su habitación bien dormidita. La peor parte del deslizamiento se la llevó ella”.

Contó que “fue un golpe muy fuerte para mí, pues yo me di cuenta de que mi mamá estaba muerta cuando llegué del trabajo (a las 6 a.m.) ya que nadie de mi familia se atrevía a decirme.

Su esposa, Azucena Oconitrillo y sus hijos Anthony y Danny Campos de 12 y 14 años, respectivamente, sobrevivieron de milagro pues estaban a pocos metros de donde se asentó el derrumbe.

“Nos fuimos a dormir temprano porque el aguacero era muy fuerte e intenso”, recordó la nuera de la hoy fallecida.

“Le dije a Paulina que nos acostáramos. Rezamos juntas y cada una se dirigió a su cuarto. El de ella estaba en la parte trasera izquierda de la casa, precisamente donde cayó todo”, comentó.

“Me muero con Dios”

“Ella era muy religiosa, estaba muy en paz con el Señor”, explicaba con dolor Oconitrillo.

La familia –quienes tenían cuatro años de alquilar el inmueble– estará de manera temporal en el salón de Pavas de Carrizal, pues la casa quedó inhabitable.

De Paulina, sus nietos la recordaron como una abuela especial que siempre estuvo pendiente de ellos y de sus hijos.

Los cuerpos de socorro tardaron cerca de 45 minutos en extraer su cuerpo.

Agentes judiciales levantaron el cadáver a las 5 a.m.

Pueblos incomunicados

El caos no terminó ahí. También en el sector de Pilas, carretera al volcán Poás, unos siete derrumbes impidieron el paso por casi de 24 horas hacia las poblaciones de San Isidro, Sabanilla, Fraijanes, Poasito y el volcán.

Con maquinaria de la zona, facilitada por vecinos, desde la mañana se dedicaron a las labores de escombreo.

También unas 10 familias fueron desalojadas del lugar por el peligro que corren , ya que esta zona es de riesgo debido al paredón que tienen detrás.

Además hubo derrumbes en carretera y tendido eléctrico.

Hasta ayer en la tarde, el paso vehicular hacia Carrizal estaba cerrado por el sector de Canoas, debido a la gran cantidad de árboles en la carretera.

Colaboraron Shirley Vásquez y Francisco Barrantes, corresponsales GN.

La víctima

Paulina López

Edad: 72 años

Muy dolidos

José López, hermano.

Mi hermana siempre se encomendaba a Dios antes de dormir. Luchó toda su vida para mantener a sus seis hijos”.

Marvin Campos, hijo.

Me di cuenta que mami estaba fallecida a las 6 a.m. cuando llegué de mi trabajo. Fue demasiado duro”.

Azucena Oconitrillo, nuera.

Rezamos juntas. Mi suegra me dijo que si se moría, se moría con Dios a su lado. Yo sé que se fue feliz al cielo”.