Rodolfo Martín
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Cañas, Guanacaste.- Un hombre de apellido Agüero habría actuado como testaferro para que el grupo que el 5 de mayo asaltó y robó ¢200 millones de un camión remesero en Limonal de Abangares se “deshiciera” de parte del botín con la compra de un terreno valorado en ¢30 millones.

Así quedó evidenciado ayer después de un allanamiento desplegado en Escazú, el cual fue coordinado por la Fiscalía de Cañas con el apoyo del OIJ de esa jurisdicción.

“Estamos al frente de una investigación de crimen organizado y, por ende, de características bastante complejas. Aún no es el momento para entrar en detalles”, expresó ayer José Tulio Rojas, fiscal auxiliar.

La propiedad, localizada en San Isidro de Coronado, fue adquirida alrededor de un mes y medio después del atraco.

Agüero, quien al parecer cuenta con antecedentes por estafas y otros delitos, habría prestado para la transacción una sociedad en la que aparece como presidente.

En la diligencia de ayer el OIJ decomisó evidencia, calificada como muy valiosa, que vincula a Agüero con el líder de la banda de apellido Gurdián.

También incautaron dinero en efectivo.

Además de Gurdián, también permanece detenido un empleado de la compañía de transportes de valores de apellido García.

Igualmente, se encuentran procesados un policía de Abangares y un mecánico de apellidos Alvarado y Sánchez, respectivamente.

Las autoridades, anteriormente, le habían decomisado a la banda alrededor de seis vehículos, trascendió ayer.