María Fernanda Bustamante, colaboradora
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Los edificios de la Universidad de Costa Rica (UCR) fueron cerrados ayer desde las 10 a.m., luego de una orden de la rectoría de esa casa de estudios superiores.

El desalojo de las facultades y bibliotecas se hizo como medida de prevención ante las protestas que realizaban estudiantes y sindicalistas de la UCR, molestos con el acuerdo en el presupuesto al que se llegó con el Gobierno.

“No me parece que nos negaran el derecho a la educación hoy, la seguridad de la U nos sacó a todos de las aulas”, declaró Carlos Aguilar, estudiante de Ingeniería Civil.

En la Universidad Estatal a Distancia y en el Instituto Tecnológico de Costa Rica no se presentaron protestas, y las clases se impartieron con normalidad.

Yamileth González, rectora de la UCR, en declaraciones a nacion.com, manifestó que no se debe “permitir que pequeños grupos con otros intereses sigan dañando la imagen de la UCR”.

Algunos estudiantes de esa institución educativa afirman estar en desacuerdo con las protestas recientes.

“No me parece que hagan ese enredo, yo no participo en esas manifestaciones”, afirmó Jackeline Morales, estudiante de Arquitectura de esa universidad.

La UCR continuará cerrada mañana.