Juan Diego Villarreal
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Alajuela. Raúl Saavedra dejó de correr las bases en el béisbol, a pesar de haber ganado dos medallas de oro con San José, y se especializó hace casi dos años en los 100 metros planos.

Mientras tanto, Shantely Scott siguió los pasos de su hermana Sharolyn Scott, en las pruebas de velocidad, para triunfar en los Juegos de Alajuela 2010.

Ambos son los reyes de la pista, al ganar el evento de los 100 metros planos, en la categoría Juvenil A masculino y femenino.

“Tuve una buena salida, había entrenado muy duro para esto y me lo merecía”, dijo Saavedra.

Rául confesó que se siente satisfecho por la victoria y que desea ganarlo todo, por lo que ahora le apunta a los 200 y 400 metros.

El atleta de Escazú, quien cronometró 11.41, es estudiante de Administración de Empresas.

“Antes jugaba “béis”, incluso con San José gané dos oros en los Juegos, pero la verdad no era tan bueno. Un entrenador me vio corriendo las bases y bueno, me dediqué al atletismo”. “

“Valieron la pena todas las matadas en el entrenamiento y las madrugadas, es emocionante ser el más rápido”.

Shantely tiene como mentora a su hermana Sharolyn Scott, seleccionada nacional, con quien entrena y de quien escucha todos los consejos en las pruebas.

“Gracias a Dios por la victoria, he entrenado muy fuerte. Son muchos esfuerzos, los que se hicieron por la falta de ayuda, no hay donde entrenar, pero igual lo dimos todo en la pista”.

Shantely, quien logró para Limón la presea dorada con 12.50, sentenció que ella se dedica casi al 100% al atletismo.

“Mi hermana me empuja a salir adelante, es un ejemplo, al igual que mi familia. Ella (Sharolyn) siempre me dice “Shanty”, que sea humilde en la victoria y en la derrota, “yo sé que usted siempre va a salir adelante”.

Al consultarle a la velocista limonense quién es la más rápida en la pista, si ella o su hermana, la ganadora de la medalla de oro respondió con seguridad. “Actualmente es mi hermana, pero estoy segura que pronto lo seré yo, cuando Dios quiera, pero mientras tanto entrenamos juntas”.

Tanto a Saavedra como a Scott les quedan las pruebas de 200 y 400 metros planos individual, por lo que no es de extrañar que se puedan colocar una presea dorada más en su pecho, en las justas.

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