EE. UU./ AFP.- Equipos de rescate seguían buscando sobrevivientes ayer en un remoto bosque de Arkansas, un día después de una devastadora y súbita inundación provocada por fuertes lluvias, la cual dejó al menos 18 muertos y un número desconocido de desaparecidos.

La inundación la causó la repentina crecida de los ríos Caddo y Little Missouri que crecieron en más de seis metros. Entre los muertos hay varios niños.

Sobrevivientes contaron que un torrente de agua anegó el Bosque Nacional Ouachita (de 700.000 hectáreas) sorprendiendo durante la madrugada a huéspedes y familias albergadas en cabaña o casas rodantes.

Los funcionarios, que aún tienen esperanzas de encontrar más sobrevivientes, consideraron imposible saber cuántas personas están desaparecidas, porque el “camping” Albert Pike, la zona más afectada del parque, no contaba con un sistema de registro.

“Nuestra sensación es que había unas 300 personas”, dijo Chad Stover, portavoz del departamento de emergencias de Arkansas.