EE. UU. y Chile/DPA, AP y AFP.- El terremoto de 8,8 grados en Chile, que lleva ya 795 muertos, podría tener consecuencias para todo el planeta, dado que movió el eje de la Tierra de tal forma que los días podrían ser más cortos.

Richard Gross, científico del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA, usó un complejo modelo matemático cuyos resultados arrojan que el sismo acortó la duración de un día terrestre (86.400 segundos o 24 horas) en unos 1,26 microsegundos.

El motivo es que un fuerte terremoto puede hacer que la Tierra gire más rápidamente y mueva masivas cantidades de rocas, lo que altera la distribución de su masa. Según Gross, aunque el sismo chileno fue menor que el de 9,1 grados en Indonesia, en el 2004, el desplazamiento del eje fue ahora de un centímetro más.

Pero hay otros eventos que pueden alargar los días. Por ejemplo, si la presa las Tres Gargantas de China fuera llenada por completo con 40 kilómetros cúbicos, el cambio de masa alargaría los días 0,06 microsegundos.

Tsunami devastador

Los 40 jubilados que vacacionaban en el balneario de Pelluhue, en un campamento junto al mar, se dieron cuenta de que tenían que actuar rápidamente luego del poderoso terremoto.

Se juntaron en un autobús para llegar a terrenos más altos, pero el maremoto desatado por el sismo llegó en tres olas, avanzó 200 metros y arrastró con todo. De las 60 personas, sólo han encontrado cinco cuerpos.

“Corrimos por la parte más alta del pueblo gritando: Salgan de sus casas. Se oían los gritos de niños, mujeres, de todo el mundo”, contó Claudio Escalona, de 43 años, que huyó de su casa junto a su esposa e hijas de 4 y 6 años.

Hubo gritos primero y luego un silencio tremendo. 20 minutos después vinieron tres olas: dos de ellas enormes, de seis metros cada una, y la tercera aún mayor.

Esa última entró en todas partes y azoló todo a su paso.

El horror que vivió Pelluhue muestra la destrucción en la costa centro-sur chilena, la más cercana al epicentro. Los sobrevivientes de Pelluhue han encontrado hasta ahora 20 cadáveres y calculan que 300 viviendas quedaron destruidas. Restos de casas, televisores, ropas, lavavajillas y peces muertos cubren las playas de arena negra.