Aashish Nanak es un niño de ocho años, nativo de la India, que ha ganado ¢275 millones con el poker “online”. Él utilizó los datos bancarios de un familiar para jugar al poker. Su actividad levantó sospechas y en varias ocasiones se le pidió que autentificara su edad. Los demás se referían a él como el “pequeño mago del poker”. Ahora le niegan el premio, al incumplir la edad mínima legal para jugar.

Igual que Terry

El caso de los futbolistas John Terry-Wayne Bridge, enemistados por un lío amoroso, no es único en el deporte. En Croacia, dos jugadores del Cibona de Zagreb de baloncesto vivieron lo mismo. Leon Radosevic habló a la prensa de la traición de su compañero Marin Rozic, con una novia. “Cuando le dije que sabía que era infiel, ella lo negó. Entonces, le puse una cinta que grabé. La cara le cambió de color 15 veces. Cogió sus cosas y se fue del apartamento”.

Con los ultras

El futbolista Mauro Zárate decidió ver el partido de su equipo, el Lazio italiano, contra el Bari, desde la misma grada de los siempre polémicos ultras laziales. El joven delantero argentino es uno de los grandes ídolos de la “Curva Nord” lazial, y estuvo como uno más de ellos: con la bufanda al cuello, sufriendo en la grada y subido a la valla. Zárate salió del Vélez Sarsfield argentino en 2007, antes de fichar por el Lazio, equipo que está cerca de los puestos de descenso.

Como Shakira

El inusitado estilo de bailar del lateral colombiano Pablo Armero, en la celebración de uno de los cuatro goles de la victoria del Palmeiras, 3-4 sobre el Santos, ganó la admiración de los aficionados y medios deportivos brasileños. El lateral izquierdo del Corinthians, Roberto Carlos, dijo que el baile fue “fantástico” y que nunca había visto algo igual. En la televisión compararon el baile de Armero con los movimientos de su compatriota Shakira.