Sólo en el primer trimestre de este año 469 menores, con un promedio de cinco por día, llegaron al Hospital Nacional de Niños para ser atendidos por ser víctimas de violencia.

Y no sólo eso: se calcula que por cada menor que ingresa en esas condiciones, hay diez casos que nunca serán denunciados.

¿Qué tipo de abuso? Físico en primer lugar, sexual en el segundo puesto, por negligencia en el tercero y en todos los casos con secuelas emocionales que sólo el tiempo sabrá si alguna vez sanarán.

De acuerdo con datos suministrados por la Unidad de Trauma de este centro médico, los pequeños llegan al hospital con lesiones producidas por fajazos, mordiscos, quemaduras de cigarrillo y golpes brutales que lesionan sus órganos y su historia.

¿Y los moretones que no se ven? ¿Esos cómo se curan?

Algunos de estos niños reciben terapia psicológica que si es consistente, logrará que aprendan a vivir con ese dolor y rehacer sus vidas a pesar de los hechos, pero en el aquí y en el ahora no se puede decir con exactitud cuál será el resultado final. Lo que sí prevén los expertos es que el 80 por ciento de los niños que morirán en el país a futuro por maltrato, serán menores de dos años.

A cuatro días de celebrar el Día del Niño, también celebramos la decisión y valentía de los encargados y expertos del Hospital Nacional de Niños de no quitar el dedo de la llaga, aunque la curen, ante la violencia y el abuso de menores en el país, y seguir denunciando cada vez que un pequeño llega pidiendo protección y ayuda. Ellos no se cruzan de brazos ante esta realidad y hacen algo para cambiarla o detenerla. ¿Y Usted?