Editorial

Redacción

Hacer planes para ir a la playa, a la montaña y hasta dejar suelo nacional son algunas de las previsiones que los costarricenses pondrán en marcha a partir de este fin de semana.

Sin embargo, aunque muchos no lo tengan presente como deberían, la Semana Santa es más que diversión, chiverre, sardinas y tamal asado.

Esta es una época para reflexionar, respirar profundo, redefinir prioridades, renovar el espíritu y también el compromiso con nuestras creencias religiosas.

Si bien es cierto es un periodo que a muchos les permite alejarse de la rutina del trabajo, no debería servir de excusa para dejarse caer en los brazos del alcohol, la violencia y la velocidad al volante.

Por esa razón hace unos días César Quirós, director de la Policía de Tránsito, anunció que durante estas fechas 900 oficiales se apostarán en diferentes vías del territorio nacional.

La Policía de Tránsito disimulará la vigilancia durante los días de celebración al utilizar vehículos diferentes a las patrullas y sorprenderá con oficiales vestidos con ropa particular en autobuses.

Con esas medidas se espera reducir la cifra de detenidos el año pasado por conducir ebrios, que en total fueron 103 personas y a 72 se les levantaron cargos penales, pero usted también tiene que poner de su parte al conducir con responsabilidad y evitar exponerse a riesgos innecesarios. Llámese velocidad, licor e incluso sentarse frente al volante cuando está cansado y con sueño.

Es importante que tome en cuenta la restricción vehicular por número de placa no se aplicará durante la Semana Mayor. Se podrá circular sin limitaciones por San José de lunes a viernes.

Y a partir del mediodía del Jueves Santo, los peajes bajo la administración del Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) no cobrarán el monto de paso. La medida se extenderá hasta las 6 a.m. del sábado 23 de abril.

La familia costarricense merece disfrutar de la celebración en paz y con la seguridad de que está a salvo. Aproveche siendo conciente de que Semana Santa es mucho más que una época para dormir tarde, ver películas y beber de más. Renueve su fe y asegúrese de volver completo a casa.

Con el compromiso de todos es posible aspirar a que los fallecimientos estos días santos disminuyan en relación al año pasado cuando 21 personas perdieron la vida en circunstancias violentas: colisiones, atropellos, crímenes o ahogamientos.

La Cruz Roja también trasladó a 42 personas en estado grave a centros hospitalarios.