Los Ángeles/AFP.- La controvertida actriz estadounidense Lindsay Lohan será formalmente acusada hoy de presuntamente haber robado un collar de $2.500, en una joyería de California, anunció la Fiscalía.

La actriz, que está en libertad condicional después de completar un periodo en un centro de rehabilitación por adicción a las drogas, admitió que tomó el collar en una tienda de Venice Beach -al oeste de Los Ángeles-, pero sostuvo que lo hizo sólo en calidad de préstamo.

Sin embargo, el vicefiscal de distrito John Lynch dijo que presentará el cargo de robo en su contra ante la corte de Los Ángeles, por el hecho ocurrido el pasado 22 de enero.

"El dueño (del collar) reportó el robo a la Policía que investigó la denuncia y presentó las pruebas a la oficina del fiscal de distrito la semana pasada", aseguró la Fiscalía en un comunicado.

La actriz, de 24 años, terminó el pasado mes de enero un tratamiento contra las adicciones en la clínica de rehabilitación Betty Ford, un centro de desintoxicación popular entre los famosos de Hollywood, ubicado cerca del desierto de Palm Springs (California).

Lohan se internó en este centro luego de que una jueza cediera a una pena de rehabilitación por un periodo prolongado.

La actriz había sido sentenciada en julio del 2010 a 90 días de cárcel y 90 días de rehabilitación por violar su libertad condicional tras haber sido condenada por conducir ebria. Pero sólo permaneció 13 días entre rejas debido al hacinamiento carcelario, antes de ser enviada al centro de desintoxicación.

Este es el último problema con la Justicia que tiene Lohan, una ex estrella del canal Disney que se convirtió en la reina de las fiestas nocturnas y blanco favorito de los paparazzis, cuando Hollywood la empezaba a considerar una nueva promesa de la actuación a punto de cumplir la mayoría de edad.