Un total de ocho temblores, algunos tan fuertes que hicieron caer objetos en las casas, estremecieron durante junio distintos lugares del país.
De acuerdo con informes de la Red Sismológica Nacional, de la Universidad de Costa Rica (UCR), el sismo de mayor magnitud se registró el domingo 19 en Punta Burica, zona sur del país.
Tuvo una magnitud de 5,1 grados en la escala de Richter, pese a que no se reportaron daños en casas, puentes, ni carreteras.
La mayoría de los temblores fueron causados por el choque de la placa del Coco bajo la placa Caribe, según los especialistas.
Los más recientes, el martes anterior, fueron provocados por la reactivación de una falla en el cantón de Upala, Alajuela.
Allí se registraron cuatro movimientos “muy fuertes”, según los lugareños. Incluso una mujer identificada como María Josefa Quesada Muñoz, de 67 años, murió luego de experimentar pánico tras los sismos registrados.
El de mayor magnitud alcanzó los 4,8 grados. Su epicentro se ubicó a ocho kilómetros al noroeste de Bijagua, Ese mismo día, hubo tres sacudidas más con magnitudes de entre 3,2 y 3,8 grados.
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