Alajuelense con visita especial

Hermes Solano Rodríguez

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Alajuela.- Se levantó temprano y en compañía de un amigo se enrumbó hacia Alajuela, al Morera Soto, la casa de su equipo. Su objetivo: conocer a sus ídolos, compartir con ellos y hacerles una solicitud muy clara, la obtención del tricampeonato.

Kevin Solano no tiene piernas, las perdió cuando era niño en un accidente de tránsito en San José. Desde entonces, ha luchado porque ello no sea impedimento para llevar una vida normal y así ha sido desde pequeño.

Su corazón y su alma son gigantes, igual que su amor por la escuadra rojinegra, y por ellos deseaba conocer a sus ídolos.

“Es la primera vez que vengo a ver a los jugadores”, afirmó.

Observó detenidamente el entrenamiento y al finalizar posó con todo el equipo para una fotografía, un recuerdo que atesorará por el resto de su vida.

“Fue una vivencia muy bonita”, aseguró el joven, vecino de Pavas, quien disfrutó su momento en la grama sintética.

Su ejemplo inspiró a los liguistas previo al arranque del certamen y es que Kevin les dejó una tarea muy clara para este nuevo semestre que inicia el domingo.

“Que entren con todo desde el principio y que queden campeones otra vez”, dice el joven.

Menudo reto el de los erizos, que deben complacer el pedido especial de este manudo.

“Es todo un ejemplo. Se veía contento, con una sonrisa en su rostro a pesar de su condición”, aseguró Carlos Clark, quien compartió un rato con él.

“Da mucha motivación que personas así vengan a visitarnos. Me motivan para enfrentar de manera positiva lo que presenta la vida”, aseguró el jugador.

A jugar

Si usted cree que la visita de Kevin fue solo para saludar y tomarse una foto está equivocado.

Él pidió la pelota y empezó a jugar con Carlos Clark y Cristopher Meneses. Sus manos y su cabeza fueron su herramienta para tocar el balón y no lo hizo nada mal, dejando boquiabiertos a los futbolistas por la capacidad del joven de hacer lo que le gusta.

“Juego fútbol con las manos”, dijo sin ningún tipo de reserva, como también juega baloncesto y participa en carreras pedestres en categoría de silla de ruedas.

Es todo un deportista.

“Tiene mucha fuerza en sus manos y brazos, para golpear el balón se perfila como lo hace uno para dar un pase y lo hace fuerte”, contó Clark, encantado con el ánimo que les imprimió Kevin.

La visita acabó con un estrechón de manos y con un mensaje claro del joven hacia el equipo.

“Espero que no me fallen”.