SAO PAULO, Brasil / AFP. - Los obreros encargados de las obras para reformar el estadio Mineirao de Belo Horizonte, una de las sedes del Mundial de Brasil-2014, iniciaron ayer una huelga para exigir mayores salarios y mejores condiciones de trabajo.
Osmir Venuto, presidente del sindicato de los obreros, informó que unos 500 trabajadores se unieron a la manifestación para pedir un salario base de 1.250 reales ($790 o ¢397.000), además de “más baños y hasta agua en la obra”.
El gobierno de Minas Gerais, cuya capital es Belo Horizonte, confirmó que “la empresa responsable por la operación del estadio ‘Governador Magalhaes Pinto’, Mineirao, está conduciendo directamente las negociaciones con los trabajadores”, según un comunicado de la Secretaría de Estado Extraordinaria para la Copa del Mundo (Secopa).
El Mineirao es una de las 12 subsedes del Mundial-2014, que en general, presentan importantes atrasos.
Belo Horizonte es una de las ciudades que buscan albergar el cotejo inaugural. Entre las otras figuran Brasilia y Sao Paulo.
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