AFP.- Aunque respetan por completo al rival, el Santos de Brasil confía en su capacidad, su localía y el empate a cero logrado en la ida, para vencer a Peñarol de Uruguay y consagrarse monarca de la Copa Libertadores.
“Estamos en una final de campeonato, en casa, y tenemos todo para ser campeones. Pero hay 90 minutos para vencer. Precisamos tener tranquilidad y jugar como siempre, porque sabemos que será muy difícil”, aseguró el arquero Rafael, reconociendo lo difícil que es el cuadro uruguayo.
“Peñarol marca muy fuerte, y dificulta mucho nuestro estilo de juego”, asegura. “Eso sí, los brasileños no se quieren confiar pues eso les podría costar caro”.
Van a luchar
Con la ansiedad de volver a cargar el título continental luego de 24 años, el entrenador aurinegro, Diego Aguirre, calificó el partido de hoy como el “más importante de nuestras vidas”.
El técnico de Peñarol recalca que “el Santos tiene el favoritismo del empate fuera de casa y ahora juega de local, con su gente. Santos llega mejor posicionado”.
“Seguramente, las apuestas van a estar a favor del Santos, por una cuestión lógica; ahora, de ahí a quién gana, hay mucho camino que recorrer”, advirtió el entrenador, que alineará el mismo equipo que en el partido de ida.
Todo está listo para la batalla. Santos quiere celebrar.
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