Al son de los timbales, los tradicionales “güiros” y el sabor de las comparsas, los palmareños calentaron su carnaval ayer.
Al ser las 6 en punto los más fiebres ya estaban bien instalados en las cercanías del estadio Jorge “Palmareño” Solís con sus infaltables sillas y hieleras para disfrutar del desfile lleno de color.
Un espectacular juego de pólvora dio el banderazo de salida para que las bandas y comparsas pusieran sus mejores ritmos.
Unos de los primeros en aparecer fue la mascarada de La Vecindad del Chavo de Barva de Heredia, que con sus tradicionales personajes y al ritmo de la cimarrona pusieron a todos a bailar.
Enseguida se escucharon los retumbos de la banda Xtreme Milenium de San Ramón, a la que le siguió la banda melódica de la Universidad de Costa Rica Sede Atlántico.
Los trajes llenos de lentejuelas y los movimientos de caderas aparecieron con la Comparsa Corazón Latino de Pavas, a la que le siguió la Banda Juvenil de Palmares una de las más grandes.
Para ese entonces el frío de la noche había desaparecido por completo y el cantante Johnnyman puso la nota de reggae en la carroza de la Asociación Cívica.
Continuaron apareciendo los payasos y gigantas de mascaradas como la de los Hermanos Ávila, les siguieron otras comparsas como la Fantasía Rumbeira, una de las más coloridas. Conforme avanzaba la noche las comparsas fueron desapareciendo, pero la fiesta quedó encendida.
