Lunes 23 de enero de 2012, Costa Rica

Añora la comida nuestra y quiere sentir el abrazo de los ticos

Los hombres le huyen a Angélica María

Neyssa Calvo Achoy

ncalvo@aldia.co.cr

Eran las 10:20 a.m., cuando sonó el teléfono. Al otro lado de la línea, “La Novia de América”, Angélica María, con una voz dulce y sonriente desnudó a la mujer que espera envejecer con un hombre tan seguro y fuerte como ella.

Y es que no es de extrañar que busque a su igual porque lo que tiene lo ha forjado con esfuerzo y todo se lo ha ganado a pulso, confesó ayer Al Día la actriz y cantante desde Miami.

Aún faltan una semanas para que visite el país y cante con Enrique Guzmán, el 15 de febrero, en el Palacio de los Deportes, pero desde ya añora la comida y el abrazo de los ticos.

¿Cantar con Enrique Guzmán es volver al pasado?

Esto lo hacemos seguido, pero es fantástico. Enrique fue mi novio cuando yo tenía 17 años, entonces somos grandes amigos de toda la vida. Nos queremos y hemos trabajado juntos para varias generaciones.

¿Qué sorpresas tiene para los ticos?

Llevaré mis éxitos como “Copa de champán” y “El hombre de mi vida” y algunas rancheras. Haremos un recorrido de los sesentas, nuestra época, y creo que a el público eso le va a gustar mucho.

¿Qué recuerda de su paso por Costa Rica?

Los ticos me han dado siempre tanto amor y tengo recuerdos maravillosos. Desde la primera vez que fui siendo una adolescente con Armando Manzanero hasta la última, siempre me han dado mucho amor. La pase de maravilla y he comido fantástico porque cocinan riquísimo... ya quiero llegar.

¿Está trabajando en Miami?

Me invitaron a hacer una actuación especial en la telenovela “La casa de al lado” el último mes y ha sido muy divertido. En la novela se muere todo el mundo y le dije al escritor que en el último capítulo se va a matar él (sonríe).

Desde pequeña vivió en el escenario. ¿Cuáles han sido los cambios en estos años de carrera?

Los lógicos, por los que va llevando la edad. Ahora voy a ser abuela y voy a ser muy feliz o una villana maldita (ríe), pero lo disfrutaré. Prefiero ser vieja que muerta.

¿Hay algo de los que arrepiente en su vida?

Sí, de haber sido miedosa porque pude hacer algo importante para mi carrera en Estados Unidos. Aprendí, y ahora nada me para.

¿Al ser bella y famosa perdió humildad?

¿Cuál bella? si era gorda aunque algo “mona”. Cuando tenía como 10 años me pasó, pero mamá me puso los pies sobre la tierra con un “cálmate , cálmate”.

¿Batallas?

Muchas, la última fue con el cáncer de mama, pero me lo detectaron a tiempo. Por eso aconsejo a la gente se haga chequeos médicos porque el cáncer da sustos.

¿Cómo está su corazón?

He tenido momentos maravillosos y también sentido dolor, pero hay que sobreponerse. Tengo años de estar sola, después del divorcio estuve como siete años con el actor Marco Muñoz. Desgraciadamente, a las mujeres famosas los hombres no se les acercan. Me lleno de trabajo y distracciones para no pensar en la soledad.

¿Qué hombre la conquista?

Un hombre que tenga su vida resuelta, que no tenga que mantenerlo. Interesante y que pueda platicar con él de todo. Me gustaría tener un compañero, pero cada quien en su casa (ríe).

Pedro Infante le dijo una vez: “Triunfarás porque hablas con los ojos, como yo”.

Así fue, el diálogo con los ojos es más importante que con la boca. Solo sé que me entrego completamente.