Si bien podemos considerar al celular como una herramienta útil a favor de la comunicación, tenemos que tener presentes los pro y contras relacionados con su uso, más aún cuando se trata de los pequeños de la casa.
Lo más importante de tener un celular es que éste ayuda a acortar distancias. No obstante, para Gabriela Piedra, psicóloga experta en familia, esta razón es inválida ya que los niños nunca deberían estar solos.
“Mi posición es que el teléfono les da una independencia para la cual los niños no están listos, luego hay una responsabilidad económica, que a fin de cuentas podría terminar siendo un problema en la casa”, mencionó Piedra.
La experta añadió sobre el elevado valor que tienen estos y la moda que ha influenciado en ver más que una necesidad una obligación por parte de los padres. “Para mí lo podrían tener hasta los 16 y 17 años”, agregó.
Prevenga y no lamente
Hay peligros reales como lo es la exposición a material pornográfico en web, además de problemas en sus centros educativos.
“Creo que ese es un tema que cada familia debe valorar, cada centro tiene su normativa y su uso en el aula es perjudicial”, comentó el ministro de Educación, Leonardo Garnier.
Estudios como el del Consejo Nacional de Protección Radiológica de Gran Bretaña, dice que el celular puede afectar funciones cerebrales y que los niños menores de ocho años nunca deberían usarlos por salud.
A pesar de ello, su uso es cada vez más común y más que verse como una moda, “debe limitarse y restringirse, los padres deben tomar el control sobre los aparatos y sobre todo analizar el peligro que estos puedan ocasionarles a sus niños”, dice el estudio.