Muchas personas se arrepienten de haber ido a la cama demasiado rápido y muy pocas se lamentan haber dado un compás de espera. El punto no es tanto qué es lo que piense el hombre. Muchos no piensan mal de una mujer si el sexo se hace presente desde las primeras citas. Habrá otros que siempre pensarán mal, aunque el sexo se postergue. El punto es que la variable tiempo permite conocer a la pareja y eso cambia el panorama sexual. Así, muchas mujeres dicen “Si hubiera sabido cómo es, nunca hubiera tenido nada con él”. Claro, todo depende de lo que se espere del vínculo, la empatía que desarrollen y sobre todo que las cosas se den naturalmente.
¿Cómo puedo negarme a hacer el amor sin que mi esposo se enoje?
Sin lugar a dudas hay que ser claro y directo y sobre todo, no poner excusas. Hay momentos en que el sexo no apetece. Además, los estudios señalan que buena parte de los hombres prefieren una negativa a mantener relaciones sexuales con una pareja que no tiene ganas y que, por ende, no se involucra de lleno en la relación. Ahora bien, el verdadero problema es cuando las negativas son frecuentes. Cuando ella no quiere la mayoría de las veces al punto que el hombre no se siente correspondido sexualmente es fundamental consultar para determinar si hay un problema físico o vivencial que opaca el deseo sexual.
Siento que el pene pega con algo cuando él me penetra totalmente
En la mayoría de las mujeres, el útero o matriz se encuentra inclinado hacia delante. Sin embargo, en un pequeño grupo de mujeres esta matriz en vez de estar hacia delante se encuentra hacia atrás. De tal manera que, con las penetraciones profundas, es posible que el pene lo toque y hasta lo golpee. Algunas veces esto no genera molestias, simplemente una extraña sensación. En otras ocasiones, puede generar dolor y en algunos casos puede ser tan intenso que impide que la pareja continúe con el acto sexual. Afortunadamente, en la actualidad contamos con diversos tratamientos para este fin.
Mi esposo me dejó hace tres años. Desde entonces solo pienso en él y no tengo ganas de hacer el amor.
En nuestra sociedad, el divorcio y la separación no han sido entendidos en su verdadera dimensión. Los estudios señalan que con frecuencia estas experiencias son tan dolorosas como la misma muerte de un ser querido y como tal nos cuesta superarlas. Por eso, si al pasar tres a seis meses, no se han recuperado las ganas de vivir, el deseo sexual, y el gusto por la vida social es crucial buscar ayuda profesional para superar totalmente esta situación.
Estuve tomando un tratamiento para la gastritis y comencé a producir leche por el pecho y a mi esposo le fascinó. ¿Es normal?
Algunos medicamentos pueden tener este efecto secundario. Es fundamental que se lo comente al médico para que él valore si realmente fue el medicamento o si hay alguna enfermedad de fondo que provoque la producción láctea. Por otra parte, algunos hombres disfrutan sexualmente con los pechos lactantes al punto desencadenar respuesta sexual.
