Heredia.- Ricardo Méndez Castro, conocido como “Bam Bam”, fue detenido en un retén de la Fuerza Pública ante sospechas de que conducía ebrio.
“Bam Bam” quien ganó notoriedad en los años 90 por integrar una banda de ladrones de carros (vea nota aparte), fue sorprendido frente a la empresa Autos Xiri, en Heredia.
Heiner Osorio, oficial de la Policía de Tránsito, aseguró que el conductor tenía “aliento etílico”.
“Bam Bam” lo negó. “Venía de un cumpleaños, pero no tomé nada. Yo vi a un oficial conocido y lo saludé. En eso se tiraron (otros agentes) a sacarme del carro.
“Dijeron (las autoridades) que que yo venía en zigzag y que hice caso omiso (a detenerse). Nada que ver”, contó Méndez.
Como no aceptó someterse allí a la alcoholemia, la Policía lo trasladó al hospital San Vicente de Paúl (Heredia) para una prueba de sangre.
“Me pusieron cuatro esposas y las botas en la cara para sacarme sangre. Eran 12 policías de Fuerza Pública. Yo no estaba violento”, aseguró el expresidiario.
Asegura que la alcoholemia dio negativa. Ayer tenía previsto acudir a la Medicatura Forense para certificar que le maltrataron las manos.
“Bam Bam” manejaba un vehículo Nissan D21 gris.
Perfil bajo
En los últimos años y tras quedar en libertad,“Bam Bam” dividió su tiempo entre el trabajo en una serigrafía y charlas de prevención del delito.
En prisión obtuvo el bachillerato. Estudió Administración de Empresas, Teología y Derecho.
Tras su salida de la cárcel, siempre ha rechazado cualquier vinculo con la conducta que lo privó de su libertad.
14 años estuvo entre rejas
Ricardo Méndez Castro, alias “Bam Bam”, terminó su sentencia de 60 años de cárcel (readecuados a 25 años) el 2 de enero del 2011, según el cómputo de Adaptación Social (Ministerio de Justicia).
A este hombre, en la actualidad de 46 años, lo sentenciaron en setiembre de 1996 por extorsión, robo agravado, hurto agravado y receptación.
La Fiscalía lo señaló como el líder de la otrora más poderosa banda dedicada al robo de vehículos y cobro de recompensas por devolución.
El juicio necesitó de 111 días para llegar a la condena. Otras nueve personas también fueron enviadas a prisión.
A finales del 2007, Méndez recibió el aval para continuar la condena en una cárcel abierta (llegaba a dormir en las noches). Luego le concedieron la oportunidad de llegar a dormir al centro San Agustín (en Heredia) los miércoles.
Permaneció en cárceles cerradas 14 de los 25 años. El buen comportamiento le ayudó a obtener beneficios.