Lunes 1 de octubre de 2012, Costa Rica

Concierto “Gigantes2”, anoche en La Sabana

Reventaron el Nacional

Allan Andino

aandino@aldia.co.cr

Como dice el señor Marc Anthony, ¡valió la pena!, la pena de esperar un día más para ver la calidad de “show” y entrega de dos titanes de la música latina: la salsa, el bolero, el pop y las baladas se convirtieron en un manjar para las miles de almas que colmaron el Estadio Nacional, en el concierto “Gigantes2”, con el citado artista y Chayanne juntos.

Al ser las 7:57 p.m., con la orquesta dando los primeros tumbos de “Valió la pena” y un Marc Anthony que no se hizo de rogar para salir al escenario, moviendo caderas y apareciendo de la parte alta de la tarima, el boricua dijo con su permiso gritando “¡y dice mi genteee!”, para arrancar su noche, la de Chayanne, y la de sus fanáticas.

El frío que dominó durante toda la previa se quedó en el olvido en un abrir y cerrar de ojos, apenas en su segunda canción, “Y hubo alguien”. La llovizna molesta también se disipó, y lo que restaba era ensalsar la pista.

Con su novia la venezolana Shannon de Lima siguiéndole de cerca tras el escenario, Anthony pidió silencio al coro para dejar que los pulmones de las salseras lo secundaran, y así fue en el estribillo “¡como túu ya lo sabees!”.

Sus característicos golpes como boxeador y fuertes palmadas derrocharon una energía que se sintió atrás en gradería sur, hasta las alas de las sombras y ni qué decir de la gramilla (entiéndase casi llegando al marco contrario), sí señores, aunque llenar el Nacional resulta difícil, ha sido uno de los mejores aforos sin miedo a equivocarme, ni Pearl Jam, ni Malpaís que ostentaba el récord con 33 mil almas, la fusión de anoche ya ocupa el primer lugar.

“Ni se imaginan lo que es vivir en esta etapa de mi vida una noche con ustedes”, fueron sus primeras palabras, y luego de lanzar un sonoro beso y divisar el llenazo, las mató con el sonido del éxito hecho bolero “Hasta ayer”.

A las 8:14 p.m. le pasaron una bandera de Costa Rica, y enmudeciendo a sus músicos con un “¡shh shh!” dejó que las damas le formaran el coro de la pieza.

Una de sus canciones emblema de su último disco “Iconos”, “¿Y cómo es él?” de José Luis Perales, continuó la nota ahora un poco más romántica. Al repertorio le siguió “Contra la corriente”, y “Vivir lo nuestro”, eso sí, las estrofas de La India las interpretaron las féminas, quedándose sin cuerdas vocales.

“¿Qué precio tiene el cielo?” y “Te conozco bien” se unieron a la lista, los salseros no querían que aquello terminara, pero no hay que ser egoístas, otra parte del público quería ver a Chayanne.

A las 9:10 p.m. el newyorkino de raíces puertorriqueñas se despidió con “Tu amor me hace bien”.

El turno de Elmer

Las luces se volvieron a apagar, y cuando el reloj marcó las 9:20 p.m., un enchaquetado Elmer Figueroa, Chayanne, acompañado de ocho bailarines (cuatro parejas), comenzaron con su parte haciendo un “remix” de “Boom boom” y “Baila, baila”.

Brazos en alto y un ensordecedor grito que dejó a más de un caballero sin tímpanos, en el momento en que el cantautor se despojó de su abrigo, dieron paso a “Lo dejaría todo”.

“El centro de mi corazón”, otra más movida, “Lola” y la balada romántica “Y tú te vas” proseguían el repertorio de temas.

“Buenas noches, es un placer bien grande para mí, estar con los ticos y las ticas. Gracias a ustedes estoy en este escenario, con esa luna tan maravillosa, con mucho cariño, con un cambio de sol de ayer para hoy, estamos juntitos porque nos queremos. Gracias mi gente, ustedes piden y yo obedezco”, expresó sumiso y con una sonrisa de anuncio de pasta dental el bailarín y cantante.

Uno de los momentos cumbres de la noche, a las 9:45 p.m., con las notas de “Un siglo sin tí”, apareció su amigo de este tour, Marc.

Efectivamente, la fusión se consumó. El año pasado fue “Volver, volver” en ese mismo escenario con Alejandro Fernández, ayer fue con Chayanne, y como dice Luis Enrique, “Yo no sé mañana”. Chayanne continuó solo, y al cierre de edición rayando las 10 p.m., con “Tu boca” y “Guajira”, no tememos en decir que el concierto de anoche valió la pena.

A reventar

Sobre la asistencia récord en el reducto Nacional, Ernesto Arceyut, productor del evento confirmó que superaron las 37 mil personas, en un corte hecho a las 9 p.m.

El sonido fue bueno y el orden imperó, solo unos que lograron brincar de gramilla al sector de oro, pero fueron controlados.