Nacionales
Miércoles 12 de septiembre de 2012, Costa Rica

Energía también podría salir poco a poco

No descartan otro gran terremoto

Cristina Fallas V.

cristina.fallas@nacion.com

Expertos del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori) no descartaron ayer la posibilidad de que suceda otro terremoto de igual magnitud al del miércoles 5 de setiembre, en Nicoya.

Esto tras darse a conocer que el movimiento sísmico, de 7,6 grados magnitud de momento, provocó que se liberara 40 por ciento de la energía acumulada, lo que no cierra el ciclo sísmico ahí.

Marino Protti, sismólogo del Ovsicori, explicó que el terremoto de hace ocho días se puede considerar como el esperado. Pero la energía liberada, representa apenas la acumulada en diez años, y no la de los 50 que han pasado desde el último ciclo sísmico.

Protti agregó que el 60 por ciento de energía que falta puede ser liberada por tres mecanismos que pueden mezclarse: réplicas, deslizamientos asísmicos (sin producir temblores) y sismos lentos.

Zonas de deslizamiento

El Ovsicori indicó que la placa del Coco se desplazará aún más por debajo de la Caribe, lo que podría ocasionar un nuevo movimiento sísmico.

Agregó que el pasado miércoles el área que más se desplazó fue la brecha sísmica de Nicoya, por lo que esperan que las zonas aledañas estén en constante movimiento.

“En la misma zona (brecha sísmica) hubo un deslizamiento de la falla de 1,8 metros cuando tenía potencial para deslizarse más de cuatro metros, por lo que puede deslizarse más aún”, dijo Protti.

La liberación total de energía podría ocasionar que en algunas zonas el deslizamiento de la falla del Coco sobre la Caribe pueda ser superior a los dos metros.

El levantamiento en la corteza se estima que fue de unos 60 centímetros después de moverse hacia el mar.

Por su parte, el rompimiento de la falla fue del 50 por ciento por lo que un nuevo movimiento terminaría de “curar la falla”, dijo.

Destacó que no es predecible indicar de qué forma se va a terminar de liberar la energía ni tampoco especificar cuándo podría presentarse un nuevo terremoto.

Por ahora el Ovsicori y científicos de varias universidades extranjeras recolectan datos sobre la deformación en la zona.

Colaboró Cinthya Bran.