El incendio que destruyó el Sábado Santo cinco casas y dos cuarterías en el barrio Claret, del distrito Merced, San José, fue provocado, según investigaciones hechas por el Cuerpo de Bomberos.
La conflagración se inició en una vivienda de madera, en el sector suroeste, donde una o más personas colocaron colchones viejos para darles fuego.
Las llamas se propagaron rápidamente y consumieron 980 metros cuadrados de construcción, la mayoría humildes ranchos.
Unas 60 personas lo perdieron todo y ayer aún permanecían en un salón de la Asociación de Desarrollo local a la espera de ayuda.
Se trata de personas de muy baja escolaridad, sin empleo permanente, para quienes conseguir casa nueva será muy difícil.
Entre los damnificados figura una niña de 13 años, con ocho meses de embarazo. “Tenía unas cositas para el bebé pero no pude salvar nada. Yo andaba en el trabajo de mami y cuando llegamos, todo se había quemado”, dijo.
Es menudita y asegura que ya tiene un nombre para su bebé. Le pondrá Anthony porque “ese nombre le gusta a mi mamá”.
Ayer, la presidenta de la Asociación local, Nidia Aguilar, le buscaba “una camita” pues debido a su avanzado estado de gestación, la menor no duerme bien en el frío piso del salón. “Se nos mejora en cualquier momento y necesita dormir mejor”, comentó.
