El ministro de Hacienda, Fernando Herrero, descartó ayer su renuncia, pues considera que la subvaloración de sus propiedades es responsabilidad de los municipios de Pavas y Escazú.
El lunes, un reportaje publicado por La Nación reveló que Herrero y su esposa, Flor Isabel Rodríguez (asesora de la mandataria Laura Chinchilla), omitieron actualizar el valor tributario de sus propiedades durante más de una década. La investigación abarcó a 11 ministros, sus cónyuges o empresas.
Tras los hallazgos obtenidos por ese diario, Herrero, su esposa y otros jerarcas corrieron a remozar el valor de sus bienes, pues se registraban por debajo del monto real.
Según Herrero, delegó la responsabilidad en las municipalidades y por eso no se puede calificar como evasión tributaria.
Sin embargo, la Ley de Impuestos sobre Bienes Inmuebles obliga a todos los propietarios a actualizar los valores inmobiliarios cada cinco años.
En declaraciones brindadas a La Nación tras el Consejo de Gobierno de ayer, el ministro aseguró que ocupará ese puesto mientras Chinchilla así lo disponga.
Diputados tributaron menos
La segunda parte de la investigación reveló ayer que ocho de los 12 diputados claves en el debate del plan fiscal también tienen propiedades con valores inferiores a los debidos.
