Al contra ataque
Hay mucho conformismo con la "Sele" Esteban Cuvardic
No me satisfizo el fogueo de la "Sele" ante Francia. No sé si es que me gusta llevarle la contraria a la mayoría o es que soy un "majadero".
Pero no me agradó por dos motivos. Primero, porque se perdió. Y después, porque la segunda parte fue malísima. Eso es lo que pienso y no lo voy a esconder.
No entiendo cómo hay gente contenta o satisfecha luego de una derrota.
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El primer tiempo fue muy bueno. En los primeros cuarenta y cinco minutos, Costa Rica dejó una buena impresión y fue mejor que Francia.
No me importa si los galos entraron confiados o no. Si estaban dormidos o no. Problema de ellos.
En esos 45 minutos, Costa Rica lució bien en defensa, controló el balón y se dio la gran jugada del "Paté" a Saborío en el primer gol. Y Danny Fonseca, en el segundo, "desnudó" a Barthez.
¿Entonces, por qué no me satisfizo el fogueo? Pues porque no hubo constancia. Se pasó del cielo al infierno. Hay que olvidarse de sentimentalismos: Costa Rica en la segunda parte fue un mal equipo. No tuvo el balón, casi no llegó al área rival, no pudo con la presión de Francia, se vio mal físicamente.
En el primer gol francés se hizo mal el fuera de juego. En el segundo todo empezó con un mal despeje de Douglas Sequeira. Y en el tercero, la defensa pecó a lo grande y permitió que Henry hiciera una de sus fantasías.
No es posible tirar a la basura lo que era un triunfo seguro. No estoy contento con lo que pasó.Me parece que en el ambiente del país hay mucho conformismo. Nos parecemos al México del Mundial de 1978: qué lindo jugamos...y cómo perdemos. Los aztecas tienen algo: odian perder hasta en amistosos. La prensa no les perdona ni una derrota ante Brasil. Por eso progresaron. ¿Y nosotros? Felices tras una derrota, sacando pecho. ¡No lo comprendo!
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