Tenía hasta 30 clientes de droga por tarde

Casi sin equipaje, cayó el pez gordo de Jicaral

Jicaral, Puntarenas. - Un colchón, un televisor y una pequeña cocina eran su único equipaje. Salir de una casa a otra con dicha carga era lo ideal para escabullirse de las autoridades.

Pero la fórmula le falló el viernes al mayor vendedor de droga en Jicaral, de apellidos Espinoza Gómez y 42 años.

A las 2 p.m., agentes del OIJ de Nicoya rodearon la casa en que estaba mientras ocho más, con sus rostros cubiertos, ingresaron sorprendiéndolo en un cuarto, intercambiando droga por dinero con otros dos sujetos.

Fuentes judiciales revelaron que a Espinoza lo frecuentaban, al menos, 30 personas en una tarde. Viajaba desde la zona del "Huerto" en Fray Casiano en Puntarenas y en este mes, en Jicaral, se había cambiado de "habitación" en dos oportunidades.

"En cada lugar trataba de vender de ¢600 mil a ¢1 millón y se despistaba", informó Greivin Moncada, jefe del OIJ de Nicoya.

La policía judicial le decomisó a Espinoza un arma de fuego calibre 25 cargada, alhajas, una cámara de video y una importante cantidad de crack, marihuana y cocaína. Además, del dinero marcado, se le encontraron ¢130 mil en efectivo.