A dos años de los asesinatos en embajada

Chilenos se sienten burlados

Familias de víctimas disconformes con indemnizaciones ticas

Jorge Sariego pasará de pie frente a la antigua embajada de Chile el próximo jueves, cuando se cumple el segundo aniversario de la muerte de su hija Rocío. Ahí, el policía tico, Orlando Jiménez, mató a la joven y a dos diplomáticos más, y luego se suicidó.

Sariego, al igual que las familias de las otras víctimas, pedirán también "por justicia", debido a que consideran "una burla" las indemnizaciones ticas por los homicidios.

"Desde las 3 p.m., mis hijas y yo nos vamos a parar en la acera. Llevaremos el carro que fue de Rocío y pondremos unas velitas", relató Jorge Sariego.

El mismo dolor se vivirá a 5 mil kilómetros de distancia, en Santiago de Chile, donde los familiares de las otras víctimas, Roberto Nieto y Christian Yussef, irán a una misa en la Catedral, pidiendo a Dios por sus almas.

También pedirán por la justicia que, dicen, no llega en este caso, pese al anuncio que hizo el gobierno costarricense sobre el pago de indemnizaciones.

El día también será difícil en Puriscal. Ahí, Auxiliadora Guzmán, la viuda del policía, señaló ayer que prefiere no dar declaraciones a la prensa.

Más demandas

En medio del dolor, aparecen más demandas en el caso.

Jorge Sariego enfatizó que nunca hubo acuerdo con el Estado tico para que le depositaran ¢54 millones de indemnización, cifra que no acepta, por lo que recurrió a los Tribunales. "No me importa el valor de la plata sino la memoria de mi hija, y por ella no voy a aceptar tres pesos", dijo.

Juan Yussef, padre de Christian, a quien indemnizaron con ¢50 millones, dijo que esto "es una burla, cuando la pérdida de nuestro hijo es incuantificable".

"El manejo de la situación ha sido pésimo, muy poco humano por parte de Costa Rica. Han pasado casi dos años, y sólo ahora aparecen con una dádiva", dijo Yussef al diario chileno El Mercurio.

Sin embargo, Osvaldo Alpízar, Director General de la Fuerza Pública, señaló que los pagos surgen producto de un acuerdo con las familias.

Yussef y Sariego habían solicitado a Costa Rica una reparación de ¢1.200 millones y ¢772 millones, respectivamente. Cuestionaron la "inercia" de Chile para interceder por las indemnizaciones. Su esperanza es un arbitraje.

Sariego le solicitó a la presidenta chilena, Michelle Bachelet, que se lo proponga al mandatario Óscar Arias.