Jornada fue un calvario para los pizzeros

Dos Pinos zarandeó la Vuelta

Marconi y Araya le dieron tremendo socollón a los peones del líder Henry Raabe

Ciudad Quesada. - Cuando el ascenso asomó, Marconi Durán y Pablo Araya, del equipo Dos Pinos Coopenae, se pusieron de acuerdo y dieron un zarpazo que cambió la historia de la sexta etapa, los 132 kilómetros entre Upala y Ciudad Quesada.

Apretaron poco antes del primer premio de montaña y dejaron botados a cada uno de los peones del líder Henry Raabe: Gregory Brenes, Federico Ramírez y José Adrián Bonilla, del equipo BCR Pizza Hut, quienes no pudieron con el paso demoledor de los pedalistas “lecheros”.

Al final la jornada fue de nuevo para Cuba, cuando Arnold Alcolea se impuso, con un “crono” de 3:26:36, en una llegada totalmente desordenada, con un tránsito libre para los vehículos, que puso en riesgo a los pedalistas.

A dos segundos ingresaron Raabe y Juan Pablo Araya, mientras Durán, quien llevó el peso de la carrera, fue cuarto a 13.

Lo que está claro es que la Vuelta será un mano a mano entre Raabe, Durán y Araya, sin menospreciar al cubano Alcolea, vencedor de la largada y el colombiano Francisco Colorado, quienes rondan los tres minutos y medio de diferencia con el pizzero Raabe.

Marconi sabe que su trabajo dio resultado en el ascenso: “todo el mundo se preguntaba en qué momento íbamos a atacar y bueno, vimos que los integrantes de Pizza Hut flaquearon y aprovechamos ese instante”.

Dedicatoria

“Esta etapa se la dedicamos a nuestro entrenador Julio César Rangel y a su hija Daniela, quien ayer cumplió nueve años, así como a nuestro “jefezazo”, José Antonio Herrero, quien nos dijo que debíamos aprovechar”, añadió Marconi.

Raabe no se inmutó por la carrera de sus adversarios: “el equipo había trabajado muy fuerte y estaban resentidos, pero yo hago valer su esfuerzo al final y pude mantener la diferencia”.

“Ellos (Durán y Araya) son los interesados en sacar tiempo, pero pude responderles. Aparentemente es un mano a mano entre ellos y yo. La Vuelta apenas empieza y aún falta mucho”.

Pablo Araya, quien también recortó diferencia, enfatizó: “no nos vamos a dar por vencidos hasta el 28 de diciembre cuando termine la Vuelta El gran trabajo de Marconi nos permitió hacer una excelente carrera, ahora estamos mejor acomodados en la general y esto le da más emoción a la Vuelta, porque falta montaña”.

El técnico del BCR-Pizza Hut, Alvin Brenes, no se explicaba lo que había sucedido y por qué sus hombres habían abandonado en el ascenso a Henry Raabe.

“En nuestros cálculos contábamos con más gente para subir, pero los muchachos se sintieron pesaditos. Confío en que solo fue un mal día, son cosas que pasan, que uno a veces no entiende, pero bueno, la carrera solo se gana con un corredor. Pablo y Marconi deben descontarle a Henry”.