Conductores experimentados y novatos

Evite accidentes, sea conductor responsable

No al alcohol ni a otras drogas

Conducir una motocicleta resulta una tarea exigente y compleja. Los conductores experimentados prestan atención al ambiente que les rodea y a la operación de la moto, identificando peligros potenciales, haciendo juicios correctos y tomando decisiones rápidas y apropiadas.

La capacidad para ejecutar y responder ante las condiciones cambiantes del camino y el tráfico está influenciada por el nivel de capacidad y atención desplegado por el conductor.

El alcohol y otras drogas, más que ningún otro factor, reducen su capacidad para pensar con claridad y conducir con seguridad. Algo tan poco, como una copa de alcohol, puede tener un efecto significativo en sus reacciones. El tomar alcohol y luego conducir es un problema muy serio.

El alcohol menoscaba la coordinación muscular, el tiempo de reacción, la percepción de profundidad y la visión nocturna. También afecta las partes del cerebro que controlan el juicio y la inhibición. Para algunas personas, un trago es todo lo que necesitan para mostrar señales de deterioro.

Cómo funciona el alcohol

El alcohol va directamente a la corriente sanguínea y es llevado al cerebro. Después de pasar a través del cerebro, un pequeño porcentaje se elimina en la orina, el sudor y la respiración, mientras que el resto pasa al hígado. El hígado sólo puede procesar un tercio de una onza de alcohol por hora, lo cual es considerablemente menos que el alcohol contenido en un trago normal.

Si bebe tragos más rápidamente, que lo que su organismo puede eliminarlos, tendrá más alcohol en él y su conducir se verá más afectado.

A medida que la concentración de alcohol en la sangre continúa en aumento, el control muscular, la visión, y la coordinación se muestran más y más afectadas. Los efectos en la conducción pueden incluir:

• Cambiar de carril.

• Arrancar rápido, bruscamente.

• No atender a ninguna señalización, no usar las luces.

• Seguir andando en las señales de alto y con la luz roja.

• Adelantar de manera inadecuada.

• Zigzaguear.

• Conducir demasiado rápido o demasiado despacio.

El uso de otras drogas también puede llevar a tener accidentes de tránsito que resulten en muertes, lesiones y daños a la propiedad.