Víctimas de choferes borrachos

“Escucho sirenas y siento que el corazón se me sale”

Medallista de Shanghái clama por prontas reformas a la Ley de Tránsito

“Cuando escucho sirenas, siento que el corazón se me sale del pecho”. Doña Eleida Gómez, madre de Esteban Jiménez, un menor que fue atropellado por un conductor borracho el 9 de julio del 2002 en San Felipe de Alajuelita, no olvida el drama.

Esteban sufrió la amputación de la pierna izquierda. Cinco años después del accidente, doña Eleida y su hijo aún sufren.

“Él ha estado decaído. A veces se siente mal porque, aunque tiene su prótesis, le falta una parte del cuerpo”, añade doña Eleida.

A ella le enoja mucho ver cómo los conductores borrachos siguen haciendo daño. “A toda persona que conduzca bajo los efectos del licor deberían quitarle la licencia de por vida”.

Laura Arias madre de Valeria. Audio: Alejandro Arley

El mismo dolor golpea a la familia del niño Gerardo Rodríguez, quien murió atropellado en Lomas del Río de Pavas por un chofer alcoholizado, el 17 de octubre anterior.

Adolfo Gairaud, abuelo del menor, recolecta firmas y organiza una caminata para el 2 de noviembre cuando pedirá a los diputados que aprueben las reformas a la Ley de Tránsito que endurece la sanciones contra estos choferes.

Madre de Jean Karlo Bejarano, sobreviviente a accidente. Audio: Alejandro Arley

Le dan carta a Pacheco

La idea de Gairaud encontró eco en los padres de la niña Valeria Vargas, medallista de las Olimpiadas Especiales.

Valeria resultó afectada emocionalmente la misma noche en que murió Gerardo, cuando un conductor ebrio colisionó el vehículo de su familia.

Francisco Antonio Pacheco habla de la carta que entregó Valeria. Audio: Alejandro Arley

Pese a que no sufrió lesiones físicas, la atleta quedó con secuelas emocionales. Su madre, Laura Arias, se lastimó el cuello.

Ayer, durante un homenaje a los atletas especiales en la Asamblea Legislativa, Valeria y sus padres entregaron una carta del abuelo de Gerardo al presidente del Congreso, Francisco Antonio Pacheco. La nota invita al diputado a asistir a la clausura de la marcha del 2 de noviembre.

El legislador aseguró que toda acción relacionada con estos casos “hay que tomársela en serio”. “Es un llamado a la conciencia nacional, tenemos que hacer un esfuerzo para que las leyes protejan más ”, dijo.

Pacheco espera que en un plazo “razonable” los diputados aprueben las reformas.

Gonzalo Castellón, abogado penalista, afirmó que la ley penal debe endurecerse en ese tema.

“Deberíamos tener un sistema que sea progresivo en la sanciones que se aplican a los conductores ebrios”, explicó.

Motociclista sería nueva víctima El herido fue auxiliado por la Cruz Roja. Hernán Ardila. Un motociclista identificado como Roy Herrera sería una nueva víctima de los choferes pasados de tragos. Ayer a las 5:15 p.m. en Santa Lucía de Barva de Heredia, un hombre, en aparente estado de ebriedad, chocó su carro con la moto de Herrera, quien sufrió traumas y fue trasladado al hospital San Vicente de Paúl en Heredia. El accidente ocurrió 50 metros al sur del supermercado Palí. En la delegación de Tránsito de Heredia informaron anoche que el conductor no quiso someterse a la prueba de alcoholemia cuando el oficial que atendió la colisión se lo solicitó. “El vehículo es un Datsun 1.500 y está detenido en nuestra delegación. Al parecer, el señor estaba en estado de ebriedad”, aseguró el oficial Sergio Chavarría.

“Que nadie pase por lo mismo” Jean Karlo Bejarano tiene 19 años . Abelardo Fonseca. Jean Karlo Bejarano fue el único sobreviviente de una colisión ocasionada por Carlos Robles Ureña, quien conducía ebrio la madrugada del 26 de octubre del 2006 en Desamparados. El martes pasado, un tribunal lo condenó a 10 años de cárcel. Maritza Mora, madre del joven, no desea que ninguna familia del país pase por la misma situación. “Hemos sufrido mucho. Mi hijo era casi un vegetal cuando lo saqué del hospital”, dijo Mora. La mujer manifestó que además de su dolor, siente el de Peggy Ureña, madre de Robles, quien debe ver a su hijo tras las rejas. Consultada por Al Día, Ureña dijo que prefería no dar declaraciones.