Patricia Recio, colaboradora
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Tamales, fiestas y luces alegraron ayer distintos puntos de la capital y llenaron a todos del espíritu navideño.

En San Sebastián, más de 2 mil personas degustaron el “hipertamal”, que ofreció Hipermás.

El gigantesco tamal fue hecho con 50 kilos de masa, un tanto igual de carne y midió dos metros de ancho por dos de largo. Fue elaborado en la tamalera Arley Navarro.

Mientras, en el Festival de Navidad, en el CENAC, hubo corrida de toros (de fantasía), cimarronas, mascaradas y piñatas. También, comidas tradicionales y exhibición de artesanías alusivas a la época.

Los más pequeños participaron en los talleres de dibujo y disfrutaron de los “ticotiteres”. Por la tarde, los grandes disfrutaron del cine al aire libre.

En la noche, cientos de rostros se iluminaron con el árbol navideño de Coca Cola.

La actividad se llenó de música y villancicos, y contó con la presentación del coro Laus Deo.

Además, quienes llegaron hasta el Gimnasio Nacional, en La Sabana, para ver el árbol, también disfrutaron de un espectacular juego de pólvora.

El gigante árbol, de 20 metros de altura, necesitó más de 3.200 bombillas para su iluminación.

En Pérez Zeledón, miles disfrutaron del tradicional Festival de la Luz, el sábado pasado.