Munich, Alemania / DPA.- En Alemania, muchos perros disfrutan de una vida que puede llevar cualquier calificativo menos el consabido “de perros”.

En el barrio de Freising, en las afueras de Munich, abrió el pasado 15 de diciembre sus puertas el primer “Canis Resort”, que albergará los primeros huéspedes cuadrúpedos. En el 2009 le seguirán sucursales en Stuttgart, Hamburgo y Baviera.

La propiedad mide 2.500 metros cuadrados y comprende un edificio central con recepción, parque de juego y nueve “Dog Lodges”. “En realidad son como pequeñas casas unifamiliares para perros”, informó su arquitecto Helgo von Meier.

Un máximo de cinco animales comparten un “lodge” (cabaña) de doce metros cubiertos con jardín propio al que se puede acceder en cualquier momento.

Una noche en el “Canis Resort" vale 80 euros (cerca de ¢54.000).

“También se puede reservar una suite, es decir, la cabaña para un solo animal, con el correspondiente aumento de precio”, señaló su dueño Thomas Gerteis.

En caso de emergencia están a disposición una enfermería para cuarentena y un veterinario.

La idea de fundar una candena de hoteles de lujo para perros la tuvo la hermana de Gerteis, Sabine. Muchos clientes de la escuela para perros que administra cerca de Munich le preguntaban si conocía un buen lugar para dejarlos en época de vacaciones.

“En muchos casos, las pensiones caninas que hay aquí tienen un poco el carácter de una perrera y la gente los deja con cargo de conciencia”, cuenta Gerteis.

Para evitar que los animales resbalen, el piso de las cabañas está revestido de resina (llamada epoxi) como la que se emplea en la construcción de yates.

Todo está dispuesto para satisfacer las necesidades del animal, que ante todo se debe sentir bien. “El cliente debe tener la sensación de que el perro se está tomando unas vacaciones”.

Su dueño no teme que la crisis financiera internacional afecte su “resort para perros”: “La demanda existe y siempre hay clientela adinerada”, recalcó.