Quito/AFP. - Liga de Quito explotará los 2.800 metros de altura de su ciudad, para irse en ventaja ante el brasileño Fluminense, mañana en el duelo de ida de la final de la Copa Libertadores de América, y dar luego el puntillazo en el Maracaná, expresaron ayer los futbolistas ecuatorianos.

"Trataremos de sacar una ventaja en el estadio la Casa Blanca de Quito y luego ir a dar el batacazo en Rio de Janeiro" en la revancha prevista para el 2 de julio, dijo el volante paraguayo Enrique Vera, una de las figuras del monarca ecuatoriano.

"Demostramos que Liga está hecho para grandes cosas. Paso a paso hemos crecido en lo físico y mental", agregó el mediocampista de Ecuador.

Liga y el 'Flu', que por primera vez en la historia disputarán la final de la Libertadores, se enfrentaron en la segunda fase del torneo con empate (0-0) en Quito y victoria carioca (1-0) en Río de Janeiro.

Por su parte, el técnico carioca Renato Gaúcho afirmó que orientó a sus pupilos a encarar el duelo como si fuera la finalísima, y recomendó cuidado especial a la defensa. "Es una decisión de 180 minutos. Pero si sufrimos una goleada en el partido de ida, no tendremos posibilidades de recuperarnos en la revancha” aseguró el entrenador.