Washington / EFE. - La cantidad de personas que en Estados Unidos usan cupones gubernamentales para la compra de alimentos sobrepasará, por primera vez, los 30 millones este mes producto del desempleo y la inflación.

Al mismo tiempo, las organizaciones de beneficencia y los comedores populares registran un incremento en el número de personas que recurren por comida, y una reducción en las donaciones que se reciben, tanto de alimentos como de dinero.

La cuota de 30 millones de personas en el programa de cupones de alimentos se alcanzó después que el huracán Katrina devastó, en agosto de 2005, la costas de Louisiana y Mississippi.

En octubre el índice de desempleo, según el Gobierno, llegó al 6,5 por ciento de la fuerza laboral, y el índice de precios de consumo para alimentos y bebidas ha subido un 6,1 por ciento en un año.

Además, la cifra de solicitudes del subsidio por desempleo en Estados Unidos se redujo en 14.000 la semana pasada y se ubicó en 529.000. El menor ritmo de despidos a mediados de noviembre refleja la preparación de las empresas, para la temporada de fiestas de fin de año.

El promedio en cuatro semanas de las solicitudes del subsidio, que pagan los gobiernos de los estados subió a 518.000, la cifra más alta en 25 años. Al mismo tiempo el número de personas que seguían cobrando el subsidio disminuyó en 54.000 y quedó en 2,9 millones.

El promedio, en cuatro semanas de las personas que permanecían en el seguro de paro alcanzó a 3,9 millones, mientras que la cifra de personas que permanecen en el programa de subsidio por desempleo muestra lo difícil que es encontrar un nuevo trabajo.