Juan Diego Villarreal
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Sabanilla No importó la lluvia para Victorino Madrigal, quien llegó desde Turrialba y ganó su eliminatoria en los 100 metros en silla de rueda.
Tampoco fue obstáculo para Rosmery Mendieta venir desde Aguas Zarcas de San Carlos y a sus 10 años se adjudicó los 25 metros planos de su categoría y está a las puertas de disputar la final.
Los sueños de los atletas ticos por una medalla en los Juegos Centroamericanos y del Caribe Especiales, que arrancaron ayer, se mide en cada esfuerzo por superar sus limitaciones y poner en alto nuestro país.
La pista sintética de las instalaciones de la Universidad de Costa Rica en Sabanilla fue el escenario de las pruebas atléticas.
“Victorino tiene más de cuatro años de entrenar. Hemos realizado unos cuatro campamentos en todo el país y ha mejorado mucho”, aseguró Leonardo Fernández, quien es el encargado de preparar al turrialbeño.
En la alberca de la UCR, Kaitlin Soto, de Alajuela, dominó su eliminatoria de los 400 metros libre y se alista para disputar hoy una presea en los juegos.
“Siempre quise aprende a nadar. La prueba que más me gusta son los 200 metros libre, porque es más corta, pero siempre quise nadar y competir, es algo muy bonito para mí”, sentenció Soto.
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