Beatriz Puerta, astróloga
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No creo más en el amor verdadero
Me enamoré nuevamente, este sentimiento sólo lo he experimentado dos veces en mi vida. El amor es alegría y un gran entusiasmo que sientes por la persona que llenó tu vida. Pero cuando no es correspondido se vuelve toda una tormenta. Pues así me siento, es difícil no aceptar que no eres correspondido. Yo sentía que él me trataba con dulzura, siempre me miraba fijamente, a veces me hablaba agarrando mis manos y cuando sentía que estaba comenzando una bella relación, de un segundo a otro, estaba desplazada. Tengo que observar diariamente, debido a que trabaja en el mismo sitio que yo, como esa persona de quien me enamoré ahora está como loco por otra mujer. Tengo que sufrir al verlo correr en busca de ella a toda hora y como tiene tantas bellas atenciones que anhelo tener. Esto lo siento desde hace dos años, hasta llegué a pensar en renunciar porque sentía que no aguantaría. Pero pensé con detalle todas las cosas maravillosas que me brinda mi trabajo, como para salir y dejarlo todo. Soy respetada y valorada por mis jefes y compañeros de labores, además me gustan mis compañeros de trabajo, amo mi profesión y disfruto mucho estar aquí. Lo que me entristece es ver cómo el amor sincero parece estar desapareciendo, a los hombres ya no les importa si una mujer está preparada profesionalmente, si es inteligente o si tiene algo de atractiva, incluso como que ya ni les importa si una mujer les ofrece fidelidad.
La despechada
Primero que todo te diré que no se ha muerto el verdadero amor y nunca lo hará. Somos nosotros mismos los que pretendemos no creer en él para alejar el dolor y el sufrimiento, pero nos debemos permitir que nos gane la ilusión. Tienes que creer que hay cientos de personas alrededor que son maravillosas, hombres que también, al igual que tú, creen que el amor verdadero existe. Es cierto que has tenido mala suerte y has encontrado a hombres que se dejan llevar por sus instintos básicos, pero no todos son iguales. Debes seguir adelante.
