Erick Carvajal M.
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Eva Camacho, nueva magistrada de la Sala Segunda, se define como una personas tranquila y serena, a quien le gusta vivir en armonía con su familia y la naturaleza.

Tal vez por eso su especialidad es, precisamente, el Derecho de Familia.

¿Qué pedazo de naturaleza le ha robado el corazón en Costa Rica?

Un árbol de Guanacaste que tenemos sembrado en un terreno en Esparza. De hecho, es el dueño del lote. Es hermoso.

¿Se ha sentado bajo esa sombra?

Sí. También lo he abrazado, es algo que se debe experimentar.

¿Tiene mascotas?

Sí. Hace poco recogimos una perrita de la calle para cuidarla.

¿Participa en grupos dedicados a la protección de animales?

Me relaciono mucho con redes de animales perdidos y maltratados. Me gusta trabajar con esas asociaciones. Lo más hermoso es cuando alguna familia los adopta para cuidarlos.

¿Es una mujer que se fija metas en la vida?

Es una de las cosas que mis hijas dicen que me admiran. No hay nada imposible, si uno pone el empeño para lograrlo. Hay una frase de Paulo Coelho que me encanta: “Cuando quieres realmente una cosa, todo el universo conspira para ayudarte a conseguirla”.

¿Cómo es su relación con sus tres hijas?

Muy buena. Somos grandes amigas; es una amistad dentro de un grupo de mujeres que luchamos por nuestros sueños.

¿Podemos decir que usted es una mamá chineadora?

Todas nos chineamos y nos ayudamos en nuestras cosas.

¿Qué libro está leyendo actualmente?

“La columna de hierro” de la escritora Taylord Cadwell. Me ha ayudado mucho en este proceso, tiene frases muy sabias sobre la fortaleza, la filosofía y la ley al servicio de los hombres.

¿Cocina?

Me encanta y a mi esposo también. Por cierto, a él le queda muy bien la paella y a mí el espagueti Alfredo.

Cuando saca el tiempo para ver televisión, ¿qué le llama la atención?

“Animal Planet” y el programa “El encantador de perros”. También me gusta el canal “Classic Arts Showcase”, que transmite una serie de programas de ópera y ballet.

¿Es una mujer de inciensos y aceites?

Me gustan mucho, me encantan. Le dan mucha armonía a cada espacio del hogar.