Carlos Láscarez S.
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Pablo Alonso Quesada Fonseca fue condenado ayer a 24 años y seis meses de prisión por provocar el accidente en el que fallecieron Natalia Trejos Sánchez y sus amigos Rebeca Mena Altamirano y Diego Quesada Guzmán, el 7 de octubre del 2007.

El Tribunal Penal de San José lo encontró responsable de tres delitos de homicidio simple, dos tentativas de homicidio simple y tres agresiones con arma contra oficiales de la Policía.

Por los homicidios simples le dieron 24 años y por las agresiones, seis meses.

La lectura del “por tanto” estuvo a cargo de la jueza Jeannete Carrillo quien explicó que Quesada chocó las motos de tres oficiales de la Fuerza Pública, se dio a la fuga, irrespetó a alta velocidad la luz roja de un semáforo y no hizo caso a todas las señales de detención que se le hicieron.

Eso lo condujo a causar el fatal accidente que cobró la vida de los jóvenes.

“Gabriela pasó por la avenida 10 a velocidad razonable y pasó en verde los semáforos. En ese momento, fue impactada por el carro que usted conducía. Un taxista que lo persiguió vio cómo usted pasó los tres semáforos en rojo de avenidas 6, 8 y 10”, dijo la jueza.

El tribunal llegó a la conclusión de que el sentenciado actuó con dolo ya que tenía pleno conocimiento de lo que significaba el brincarse los semáforos en el centro de San José.

“La condena no es una venganza de la sociedad. Usted es joven, con familia y sin antecedentes. Se espera que con esta pena usted se rehabilite, reflexione sobre los hechos y cambie el rumbo de su vida. Usted no estaba bajo coacción o amenaza”, le explicó Carrillo a Quesada.

María Gabriela Rojas, sobreviviente del accidente, indicó que el fallo fue justo. “A ellos (sus amigos fallecidos) los amo con todo mi corazón y estamos dándoles honor”, dijo.

El defensor Moisés Morales insistió en que irá a Casación, al considerar que a lo largo del debate trajeron suficiente prueba técnica y que el tribunal se inclinó solo hacia un lado.

La querellante Grazy Calvo dijo que se hizo justicia por las familias de víctimas.

Complacidos

Alejandro Trejos, papá de Natalia.

Siempre confiamos en la Justicia. Es indescriptible el dolor. Ya es hora de detener los accidentes”.

Rafael Mena, padre de Rebeca.

No era para menos el fallo. Esto es un mensaje para tanto muchacho que anda en las calles sin respetar la vida de otros”.

María Gabriela Rojas, sobreviviente.

Están tomando en cuenta las leyes de Costa Rica. La verdad siempre sale a la luz. Si van a tomar, no conduzcan”.