Franklin Arroyo González
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Ana Catalina Lizano tomó la belleza y fragilidad de su hija, Ana Catalina Guido, de 12 años, como motivo para hacer su gran obra de arte.

Consiste en seis broches, un par de aretes, un brazalete y un collar, que representan la transformación de un corazón a una mariposa.

“Son los cambios sorprendentes que he visto en mi hija en dos años, en lo físico y en lo emocional.El corazón es la parte más tierna de un ser y la mariposa es la belleza y fragilidad que tienen ahora. Es tan vulnerable a tantos peligros, como las mariposas”.

La obra de arte, hecha de plata con incrustaciones de piedritas, fue a concursar a Francia contra 93 competidores de Europa. Ella quedó de finalista.

Aún están en el proceso de selección y Lizano hace mejoras a su obra.

“A ella le gustó mucho, pero me dijo que ojalá que no gane porque entonces la obra de arte se quedaría en Francia y ya no sería de ella. Yo le dije que eso tiene solución”.