Rodolfo Martín
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Danny Hayling Shaw, considerado como el más grande beisbolista nacional, falleció ayer en el hospital Blanco Cervantes, a los 81 años, debido a una grave afección renal.

El pueblo limonense experimentaba ayer un ambiente de consternación, por el fallecimiento de su gran ídolo.

El exbeisbolista, un destacado lanzador derecho que jugó profesional en Nicaragua, México y los Estados Unidos, solicitó ser cremado, según sus familiares.

Sin embargo, ante la presión de decenas de amigos y seguidores, no podía irse sin ser despedido con los honores que merece una leyenda como la suya.

Las ceremonias serán hoy y mañana en Limón.

Llegó a jugar en las divisiones menores de los Dodgers de Brooklyn. Está incluído en un salón de la fama, en Kentucky, al lado, entre otros peloteros, de Hank Aaron, Frank Robinson, Nolan Ryan, Ty Cobb, Willie Srtargell y Don Mattingly.

* Colaboró Róger Amoretty, corresponsal.

Voces caribeñas

Floyd Gibson, pastor, iglesia Episcopal

“Un gran amigo y una persona siempre dispuesta a compartir sus conocimientos”

Lindell Rouse, exbeisbolista

“Me lanzó en el juego de su despedida y me ponchó. ¡Una inolvidable tarde de sábado!”

Maxie Barthley, exbeisbolista

“Ídolo de generaciones, muchos de ellos grandes lanzadores, pero nadie como él”

Hernán Byfield, exbeisbolista

“Tuvo una gran recta. ¿Cuál habría sido su velocidad? En esa época no podía medirse”