EE. UU. / EFE. - La compañía Intel, el mayor fabricante mundial de microprocesadores, anunció ayer que invertirá $7.000 millones durante los próximos dos años en la mejora de plantas de producción en Estados Unidos.

“Invertimos en EE. UU. para que Intel y este país sigan a la vanguardia de la innovación”, manifestó el presidente y consejero delegado de la empresa, Paul Otellini, en un comunicado de prensa.

La compañía señaló que esta inversión, que se centrará en instalaciones que posee en Oregón, Arizona y Nuevo México, es la mayor hasta ahora que dedica a la producción de procesadores más rápidos, pequeños y que consumen menos energía.

Otellini resaltó que las plantas que recibirán la inyección de fondos “producirán la tecnología para computadoras más avanzadas” y aseguró que eso será crucial para la era digital.

La inversión facilitará el mantenimiento de unos 7.000 empleos cualificados que forman parte de una plantilla de unos 45.000 trabajadores con los que cuenta en Estados Unidos.

Intel dio a conocer este nuevo compromiso de inversión después de que anunciara el pasado 21 de enero que paralizará la producción en cinco plantas para ajustar su capacidad a las condiciones actuales del mercado, lo que afectará a entre 5.000 y 6.000 empleados.