Christian Campos
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Liberia. La tarde que se pensó sería gloriosa para el repunte del toro “El Malacrianza”, volvió a ser la pesadilla del animal, originario de playa Garza.

Sobre sus lomos, el poder de Jackon Ruiz fue mayor en el redondel de Liberia.

Esta vez sí jugó. En esta ocasión no tuvo pretexto. Desde que salió de la manga, ayer en las fiestas cívicas de esa ciudad, el toro mostró su poderío, pero no pudo zafarse las piernas del liberiano.

Apenas a dos segundos de haber salido del corredor, el toro se hincó producto de una caída, pero el montador siempre se mantuvo firme sobre él.

Mientras, gran cantidad de improvisados le hicieron rueda al duelo y le abrieron paso apenas se puso de pie.

A partir de allí, el montador se mantuvo por todo el redondel, levantando a la multitud que llenó el lugar y que lo vociferaba.

A su salida –que la hizo limpia– los improvisados no encontraron mejor manera de reconocer el esfuerzo del montador, que subirlo en hombros. Todos ahí querían felicitarlo.

La monta de Ruiz fue la última de otras seis con el mejor ganado, según los que conocen del tema en la zona guanacasteca.

La derrota de “El Malacrianza” demuestra que el toro está en decadencia. Su fama se empieza a apagar tras 9 años de brillar en todas las corridas del país. Parece que llegó la hora de cederle su sitio a ganado más joven.