Washington/AFP.- La Iglesia Católica estadounidense desembolsó $436 millones en el 2008, por casos de abusos sexuales en los que estaban involucrados miembros del clero, indica un informe oficial eclesiástico.

La enorme suma fue pagada en acuerdo con las víctimas, según el informe, que señala que la Iglesia está implementando una carta para proteger a los niños.

La suma por los convenios acordados cayeron un 29% respecto al récord de $526 millones pagados en el 2007. Alrededor de $22 millones se destinaron el año pasado a pagar terapias para las víctimas o apoyo a los abusadores acusados, afirma el documento, encargado por la Conferencia Episcopal de la Iglesia Católica de Estados Unidos en los últimos seis años.

Mientras los pagos de la Iglesia relacionados con casos de abuso sexual cayeron, el número de nuevas denuncias y víctimas aumentó 16%. El informe señala que el año pasado se presentaron 803 nuevas denuncias de abusos, más de la mitad de las cuales corresponden a niños, contra 692 en el 2007.

Más de la mitad de las nuevas denuncias corresponden a casos de abusos sexuales, que los denunciantes sitúan entre 1960 y 1974. Muchos de los supuestos abusadores murieron o ya no ejercen sus ministerios religiosos. El documento afirma asimismo que el número de víctimas pasó de 689 en el 2007 a 796 en el 2008.

Dos tercios de las víctimas eran varones y más de la mitad tenían menos de 18 años cuando se produjeron los abusos. Más de una de cada cinco víctimas tenía menos de 10 años cuando fueron abusadas y el año pasado hubo diez nuevas denuncias creíbles de abusos contra una persona de menos de 8 años, asegura el informe.