Mario Guevara, colaborador
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Barrio Cuba. - Un día después del asalto que lo tuvo entre la vida y la muerte, el guarda que recibió un disparo en el estómago, Rafael Hernández , de 46 años, se recupera en el hospital México.

En ese centro médico informaron que permanece estable en la cama 4 de observación de emergencias.

Hernández enfrentó junto a su compañero Larry Pérez Morales y el mensajero Rónald Ibarra Salazar a tres hombres que intentaron asaltar la empresa Muebles Metálicos Alvarado.

Ibarra vive a la par del negocio y cuando escuchó los disparos intentó ayudar a los vigilantes.

La esposa de Ibarra, Adela Cavallini, recuerda cada una de las palabras que le dijo a Rónald cuando escuchó los disparos. “Él venía de cobrar unos cheques e ingresó a la casa. Lo detuve para que no fuera ahí porque la balacera estaba en lo mejor, entonces yo le dije Rónald no vaya, no ve que están volando bala ahí adentro y no me hizo caso”, detalló.

Cavallini dijo que es la segunda vez que Ibarra sobrevive a la muerte. “Hace ocho años Rónald estuvo ocho días en coma en el hospital de Puntarenas, después que casi se ahoga en Jacó. Cristo lo salvó en esa ocasión y lo va a traer de vuelta sano y salvo”.