Angie López Arias, colaboradora
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Si bien la magnitud de los sismos tiende a disminuir, el sur del país no deja de moverse. Seis temblores en total asustaron a la población el sábado pasado.

El científico Carlos Montero, del Obsevatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori), precisó que luego de los movimientos sentidos en la mañana y tarde ocurrieron dos más.

Uno se presentó a las 4:06 p.m. con una magnitud de 3,3 grados en la escala Richter y se ubicó a 25 kilómetros al suroeste de Laurel de Corredores.

Tan solo minutos después, exactamente a las 4:13 p.m., se presentó otro temblor de 3,9 grados y se originó en el mismo sitio.

“Es una secuencia importante de sismos que corresponde a la subducción de la placa Coco que se introduce sobre el bloque de Panamá”, explicó .

Según Montero, esa zona está muy cerca de la fractura de Panamá, en donde suceden roces de la placa Coco con la Nazca.

“Ahí han ocurrido terremotos como el de 1904 y 1941. Es una zona altamente sísmica que se extiendesde la Península Burica y se prolonga hacia el Océano”, dijo.

Resulta difícil establecer con certeza si sucederá un sismo mayor. “Está dentro de las posibilidades, pero el comportamiento es hacia la disminución. Hay que reconocer que es una zona tectónica muy activa y compleja”, agregó el experto.