Sofía Quesada Chavarría
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Las divisiones de grupo fueron evidentes en la Selección, según dijo Eduardo Li en su informe. En el mismo, Wálter Centeno aparece como “protagonista” en varias ocasiones.

Según el jerarca, las diferencias entre jugadores empezaron a ser más claras en la Copa Oro.

“Algunos jugadores no compartían actividades con otros y se mantenían en grupos separados”, indicó en el informe.

En ese momento, el Comité Ejecutivo le solicitó una explicación a Kenton y su respuesta fue que no existía tal división.

Las desavenencias en la “Sele” aumentaron con la salida de Harold Wallace y Freddy Fernández por su bajo rendimiento.

“Esto generó un malestar por parte de los demás jugadores, en particular de Centeno, que hizo público su malestar”, apuntó Li en su informe.

Posterior a esto, el motivador German Retana fue separado del grupo por recomendación del técnico Rodrigo Kenton, quien insinuó que él (Retana) le afectaba la relación con los jugadores.

En El Salvador se volvieron a dar situaciones anómalas. “Se conoce que existió un altercado entre Centeno y otro jugador en el camerino”.

Eso no fue todo. “Luego del juego ante Guadalupe, el grupo estaba observando el partido de fondo entre México y Haití. Varios jugadores, encabezados por Centeno, se querían ir al hotel. Los demás futbolistas querían quedarse, a la espera de que otros dos terminaran de comer”.

“Se presentó un intercambio entre los dos grupos; Kenton no le dio mayor importancia. A partir de ese momento, la división fue más evidente. Se le pidió a Kenton una explicación y su respuesta fue que no existía tal división y que todo estaba bien”. Con la llegada de René Simoes, “se dio la tarea inmediata de reorganizar el grupo y sanar muchas diferencias y debilidades que se dieron con Kenton”.