Antonio Alfaro
analfaro@aldia.co.cr

Bryan Ruiz de seguro aún le da vueltas a aquella jugada. Sucedió tan rápido. No había terminado de lamentar haber estrellado en el poste el que podía ser el gol de la clasificación, cuando el Werder Bremen liquidó el juego.

El Twente perdía 3-1 en su visita a Alemania, pero un gol más le daría el pase, dada la victoria en el primer juego (1-0) y la regla que premia los goles de visita en caso de empate global.

Entonces, en una linda jugada, Bryan picó hacia el área mientras sus compañeros salían de ella; el pase globeado fue perfecto y lo dejó con la pelota dominada de frente al arquero.

El tico quiso tocar a una esquina, pero la estrelló en el palo.

Bryan se agarró la cabeza, sin sospechar que venía lo peor: un minuto más tarde, Pizarro anotaría su tercer gol del día y el cuarto de Bremen para liquidar la serie. Era la despedida del Twente en los dieciseisavos de final de la Liga Europa, en una serie que para Bryan y compañía fue como la noche: nublada y fría (6 grados).

Resultados

Juegos de ayer / * Equipo clasificado