Franklin Arroyo González
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El volcán Poás, el más visitado de todos los parques nacionales, con una afluencia de más de 350 mil turistas al año, estaba ayer repleto de gente.
Con senderos, área de “picnic”, parqueos, la laguna Botos a media hora de caminata, restaurante, tiendas y servicios sanitarios, los turistas pueden observar, además del coloso, aves y una exhuberante vegetación.
“Me gusta mucho la montaña y este volcán. La última vez que vine fue hace como dos años”, nos dijo el turista nacional Jonathan Sibaja, de Santo Domingo de Heredia, quien andaba con su familia.
Los extranjeros se quedan boquiabiertos. “Las vistas son maravillosas y las tiendas que hay para los turistas son excelentes”, considera Daren Walker, un visitante procedente de Estados Unidos, que está aprendiendo español en Costa Rica.
Llegar a un parque nacional como el volcán Poás, puede ser una opción muy agradable y cercana a la capital en estos días santos, alejada del tumulto de las playas y de las presas a Caldera.
Disfrutar de la majestuosidad de un volcán, observar pájaros o caminar por senderos, son algunas alternativas que debe considerar por económicas y porque lo ponen en contacto con la naturaleza, uno de esos tesoros naturales no tan alejados de la capital.
El Ministro de Ambiente, Energía y Telecomunicaciones (Minaet), Jorge Rodríguez, explicó que los parques permanecen abiertos para incentivar el turismo nacional.
“Para mucha gente los hoteles en Costa Rica son caros. Es una opción que tienen, pero eso implica un esfuerzo mayor porque los parques están más expuestos y debemos cuidarlos más”, dijo.
Usted escoge
El parque del Poás abre de 8 a.m. a 3:30 p.m. La entrada tiene un valor de ¢1.000 y ¢400 para los niños. El parqueo, por el tiempo que lo requiera, vale ¢1.100.
Está a solo una hora y 20 minutos de San José y en el camino hay restaurantes y sodas.
Otro muy visitado es el coloso del Irazú. La carretera está en buenas condiciones, con estacionamiento, mirador, alamedas, cafetería, servicios sanitarios y área de almuerzo. El horario es de 8 a.m. a 3:30 p.m. y las tarifas ¢1.000. Niños pagan ¢400 y está a una hora y media de San José.
Otro lugar para recrearse y muy cercano es el Braulio Carrillo, atravesado por la ruta 32, que comunica San José con Limón, en el Caribe.
Cuenta con una vegetación de bosque siempre verde, de gran densidad y complejidad florística. Algunos parajes, incluso, están abiertos al público.
Encantados
Heydi Walker, Estados Unidos.
“Es un parque muy bonito, es primera vez que vengo a un volcán y me parece muy lindo. También iré al Arenal”.
Steve McCarthy, Estados Unidos.
“Es más grande de lo que me había imaginado. En EE. UU. no había oído de este volcán, pero al llegar aquí sí”.
Daren Walker, Estados Unidos.
“La vista es maravillosa. Es primera vez que visitó un volcán y me parece bonito. La gente aquí es amable”.
Jonathan Sibaja, Santo Domingo.
“Me gusta mucho la montaña, aunque también visito playas. Trato de venir seguido, la última vez fue hace dos años”.
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