Madrid / DPA-. Barcelona y Madrid viven hoy las realidades opuestas que imponen el éxito y el fracaso. Mientras los azulgranas celebran el nuevo logro de un equipo histórico, los blancos se enredan en debates complejos sobre su futuro.

Barcelona amaneció con la mejor resaca posible, la de la celebración de un nuevo título de la Liga española de fútbol, sólo empañada por los destrozos causados por los violentos. Todo lo contrario a lo vivido en Madrid, donde la ciudad tuvo una jornada rutinaria.

La prensa de ambas ciudades fueron ayer testimonio de dicho contraste. Mientras el diario “Sport” titulaba “El mejor campeón”, “Marca” hablaba del inminente despido de Manuel Pellegrini, el técnico del Real Madrid.

“El Barcelona conquistó el campeonato más duro, el más reñido de la historia, el más apasionante, el que se decidió en la última jornada y logró la barbaridad de 99 puntos”, explicaba “Mundo Deportivo”.

Y “As” reflejaba el pesar de la hinchada blanca: “El Real Madrid ha hecho también una puntuación extraordinaria, aunque sólo le haya servido para morir en la orilla”.

Ambas ciudades ofrecen enormes contrastes, comenzando por los banquillos. Mientras a Josep Guardiola quieren convertirlo en el “Ferguson del Barcelona”, como dijo hace poco Sandro Rosell, máximo favorito a suceder a Joan Laporta como presidente del club, el Real Madrid busca entrenador.

Y el nombre del portugués José Mourinho ocupa en Madrid casi más titulares que el de Pellegrini, a quien todos dan por sentenciado. La historia es tozuda y el Real Madrid de Florentino Pérez busca nuevo entrenador, como viene sucediendo en la última década.

Por otro lado, Laporta se apresta a dejar el Barcelona como el presidente más exitoso en la historia del club, mientras que el nuevo proyecto de Florentino Pérez, que llegó de nuevo a la presidencia esta temporada, arranca bajo sospecha.

En Barcelona se filtran nombres de posibles fichajes para la próxima temporada, “cracks” encargados de reforzar un proyecto muy consolidado como David Villa y Cesc Fábregas.

Por contra, en el Real Madrid se habla más de las salidas (Raúl, Guti, Drenthe, Fernando Gago, los dos Diarra...) que de las entradas. De hecho, el club no confirmó aún quién será su entrenador en el próximo curso.