Miguel Calderón Suárez y Jorge Calderón, corresponsal GN
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Cartago.- ¿Por qué mató a su hija? Es la pregunta que se hacen muchos vecinos del barrio El Molino en Cartago tras conocer la noticia de la muerte de Ana Lorena Monge Vega y de su pequeña de apenas cuatro años de edad.

Y es que desde el momento en que todo Cartago tuvo conocimiento del hecho, comunidades como el INVU, Los Ángeles y el Bosque de Oreamuno se sumieron en un solo dolor para llevar resignación a los familiares de la mujer, quien la mañana del viernes estranguló a su hija y luego se quitó la vida.

El viernes en la noche la cantidad de personas en la casa de los padres de Lorena era impresionante. Unos llevaban recuerdos, flores y el respectivo pésame.

Ayer, la iglesia de Santa Isabel en el Bosque de Oreamuno se hizo pequeña durante los funerales.

“Sigan leyendo la palabra de Dios que eso los confortará" dijo el padre Carlos Molina a la mamá de la joven, quien siempre acostumbraba a leer en misa parte de los capítulos del Evangelio. En tres carrozas de la funeraria del Magisterio llegaron los cuerpos.

La familia quería enterrarlas en la misma caja, sin embargo, fueron sepultadas en ataúdes distintos. “Ana quería vender árboles en Navidad”, dijo su tía Sonia Solano.

La víctima

Ana Lorena Monge Vega

Edad: 38 años

“Sufría grave depresión”

La mujer era ama de casa.

Según dijeron vecinos y amigos de Ana Lorena, la mujer atravesaba por una fuerte depresión debido a una supuesta infidelidad de su esposo.

Galo Guerra, psicólogo conductual, comentó que la joven sufría de una depresión grave que consiste en perder el control de sí mismo y sufrir un desequilibrio importante en su mente.

“Producto de este tipo de depresión una persona puede llegar a matar a otra. Como sucedió en este caso”.