Tomado de El Mercurio, Chile

         

Conocido por su capacidad para escabullirse de los militares, Luis (o Víctor Julio) Suárez Rojas, alias “Jorge Briceño Suárez”, recibió el sobrenombre de “Mono Jojoy”, gracias a un gusano de la selva, llamado “mojojoy”, cuya habilidad es precisamente escaparse de sus depredadores.

No se sabe si era parte de su plan de huida, pero siempre procuró que en su guardia personal hubieran entre 10 y 12 mujeres. Eso le daba “tranquilidad”.

Nacido en 1953 en el municipio de Cabrera, uno de los fortines de las FARC hasta hace pocos años, creció en el seno de una familia de campesinos ligados a grupos subversivos. Su padre peleó en los 50 contra el régimen conservador de la época, mientras que su madre fue cocinera de Jacobo Arenas, uno de los fundadores de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), en 1964.

Aunque “Briceño” sólo se integró como soldado raso de la guerrilla a los 22 años, en 1975, desde niño asistió a clases de marxismo. En sus primeros años fue cocinero de Manuel Marulanda, el líder máximo de las FARC, pero su sangre fría y visión estratégica para la guerra le permitieron ascender rápidamente dentro de las filas insurgentes y comandar operativos importantes en la serranía de La Macarena.

Fanático de las armas, sus acciones militares con armamento no convencional, como los cilindros bomba, lo convirtieron en uno de los hombres más sanguinarios de la organización.

Recio y con don de mando

Las autoridades lo responsabilizan de las principales tomas militares cometidas por la guerrilla a lo largo de su historia, como cuando en 1998 ocupó durante tres días la ciudad de Mitú, donde murieron 37 personas y 56 miembros de la Fuerza Pública fueron tomados como rehenes.

Además, se le acusa de haber implementado las “pescas milagrosas”, estrategia a través de la cual las FARC ejecutaban secuestros masivos. Se le señala como el cerebro de los plagios de personalidades, políticos, policías y militares, y de haber creado en la selva los “campos de concentración”, donde se les mantenía cautivos en jaulas de palos y alambres de púas.

Quienes lo conocieron coinciden en su perfil. El expresidente Andrés Pastrana, quien mantuvo diálogos con las FARC y conoció a “Briceño”, lo definió como “el hombre encargado de generar el terror, con más muertes encima”.

Periodistas que lo entrevistaron en esas negociaciones dicen que era un “hombre recio, con don de mando”, “acostumbrado a la muerte” y que “no perdonaba nada”, pero a la vez “muy bromista”, mientras que un informe de inteligencia lo calificaba como “autoritario y radical”.

Los que peor lo recuerdan son quienes sufrieron su mano dura. Gloria Polanco estuvo secuestrada entre 2001 y 2008 y asegura que a “Jojoy” nunca “le corrió sangre por las venas”. Contra él pesaban más de 62 órdenes de captura, dos peticiones de extradición y 25 investigaciones.

Su vida

5 de febrero, 1953

Nació Víctor Julio Suárez Rojas, alias “Mono Jojoy”, en el municipio de Cabrera, departamento de Cundinamarca. Era hijo de Romelia Suárez y Noé Suárez Castellanos.

1975

En ese año se vinculó a las FARC como guerrillero raso. En forma progresiva fue subiendo de nivel hasta convertirse en el comandante del Bloque Oriental.

2002

En ese año, el Gobierno lo responsabilizó directamente del secuestro de la franco-colombiana Íngrid Betancourt, aspirante presidencial para el periodo 2002-2006.

Mayo de 2008

Según informes de inteligencia del Gobierno, seis hombres de su confianza lo intentaron asesinar y posteriormente cobrar la recompensa que se ofrecía por el jefe guerrillero.

23 de setiembre, 2010

En la operación “Sodoma”, fue abatido “Mono Jojoy”, quien era jefe del Bloque Oriental. Los combates tuvieron lugar en la región de la Macarena en una zona llamada “la Escalera”.